Instrumentista y compositor carioca de nombre Joaquim Antônio da Silva Calado. Su padre, de mismo nombre, era músico modesto, pistonista y mestre-de-banda en la Sociedade União dos Artistas y en la Sociedade Carnavalesca dos Zuavos. Se supone que inició al hijo en los estudios musicales. Calado Júnior, como fue conocido hasta la muerte del padre, en 1867, aprendió piano y flauta y, en 1856 inició sus estudios de composición y regencia con Henrique Alves de Mesquita, luego interrumpidos por el viaje del maestro a Europa. En julio de 1866 se presentó en un concierto, delante de la familia imperial, como segundo flautista en el Teatro Ginásio Dramático. Esa habría sido su primera exhibición en una sala de conciertos, aún joven músico, casado muy pronto, ya actuase había algunos años como profesional, tocando piezas eruditas y música danzante en fiestas de familia y bailes, para ganarse la vida y el sustento de la familia de cinco hijos. Su primera composición, "Querosene", data de 1863. En 1867 obtuvo su primer éxito de compositor, con la quadrilha Carnaval de 1867. Volviéndose profesor de flauta del Conservatorio de Música, en 1871, pasa a ser reconocido como mayor flautista brasileño de su tiempo. De su grupo hacía parte un amigo, el flautista Viriato, además de Luisinho, Capitão Rangel, Baziza Cavaquinho, Juca Vale, Ismael Correia, Lequinho y el guitarrista Saturnino, gran improvisador y su acompañante predilecto. Imprimió estilo propio a la ejecución de la flauta, en una agilidad y virtuosismo que serían imitados por toda una generación de flautistas, permitiéndole tocar la melodía en rápidos saltos octavados, de manera que diese la impresión del sonido de dos flautas simultáneamente. Condecorado en 1879 con la Ordem da Rosa, en el grado de comendador, juntamente con los demás profesores del Conservatorio, fue también profesor de música en el Liceu de Artes e Ofícios, de Rio de Janeiro, nombrado por medio de su padrino, el marechal-de-campo José Basileu Neves Gonzaga, padre de su compañera de choro, la "maestrina" Chiquinha Gonzaga. Luego, después del Carnaval de 1880, contrajo meningoencefalitis, epidemia que asolaba Rio de Janeiro, y murió en marzo, siendo sepultado en el cementerio São João Batista. En 1885 un grupo de amigos promovió, en el Teatro D. Pedro II, un recital cuya renta se destinó a la compra de una casa modesta, en la Rua do Conde, para la familia del compositor, y de una sepultura junto a la de su compañero Viriato, en el Cementerio de São Francisco Xavier. Lanzador de las bases de la nacionalización de la música popular brasileira y creador de un estilo de interpretación que marcó época, elevó la virtuosidad de la flauta a nivel no hecho hasta entonces en Brasil, convirtiéndose jefe de una escuela de flautistas excepcionales, entre los cuales: Viriato, Patápio Silva, Nola, Plínio, Henrique Flauta, Pixinguinha, Benedito Lacerda, Altamiro Carrilho. Es considerado como "pai dos chorões do Brasil", pues encabezó la generación de músicos populares que, a finales del siglo XIX, fijó la formación del grupo de instrumentistas que pasó a la historia con el nombre de "choro".