Poeta. Cursó el Colégio Pedro II, en Rio de Janeiro y se matriculó en la Escola Politécnica, en São Paulo, abandonándola por motivos de salud. En 1913 precisó internarse en el sanatorio de Clavadel, en Suiza, donde conoció al poeta Paul Éluard. De vuelta a Brasil en 1917, publicó “A cinza das horas”, obra donde Mário de Andrade localizó, tiempo después, prenuncios de modernismo. “Carnaval”, publicado en 1919, confirmó esa tendencia. Su casa, en el barrio de Lapa, donde vivió durante varios años, era frecuentada por poetas, pintores y músicos, y de esos encuentros surgió la oportunidad de Jaime Ovalle componer dos músicas para poemas suyos que marcaron época: “Azulão” y “Modinha”. Años después escribió versos para que el compositor Ary Barroso pusiera música (“Portugal, meu avozinho”, fado que nunca llegó a ser grabado). Tuvo algunos de sus poemas musicados por Francisco Mignone, Camargo Guarnieri y Villa-Lobos, para canto y conjunto de cámara.