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Wilson Saoko (izda.), Joe Arroyo (centro) y Julio Ernesto Estrada (dcha.).
 La car rera de Joe Ar royo a ni vel nacional comenzó a forjarse a sus 17
 años, cuando en una presentación en Cartagena fue escuchado por Julio
 Estrada, director de la orquesta de salsa Fr uko y sus  Tesos.   Fotografía:  CEET.





 El propio Mauricio Silva reconoce que Álvaro José Arroyo fue   mental con él.  Una pieza que mostrara y contara la historia,
 genio, figura, inspiración, voz y sabrosura pura.  Todo a la vez.     no sólo de un cantante, sino de toda una generación de sal-
 Como Benny Moré, de ese calibre, podríamos decir que fue el   sómanos y noches eternas en Colombia.  Lastimosamente el
 más impresionante de todos los que forjaron este magnífico   proyecto nunca se pudo realizar, pero el proceso de pensarlo y
 baile nacional.  Dejó un legado de 47 álbumes y unas 300 can-  armarlo fue increíble”.
 ciones, de las cuales 40 alcanzaron los primeros lugares de las
 listas de la música tropical.  El proyecto que sí salió adelante fue una telenovela titulada
 “El Joe, la leyenda”, de los guionistas Andrés Salgado y Natalia
 Desde principios de los años 80, Joe Arroyo sufrió múltiples   Ospina, que se inspiraron en la vida de Joe Arroyo.  Produci-
 problemas de salud que le impidieron realizar giras y por los   da por la Cadena RCN y con una duración de 90 capítulos, el
 cuales varias veces fue dado por muerto.  El 7 de septiembre de   cantante colombiano no pudo terminar de verla porque falleció
 1983, tras sufrir una tiroides retrospectiva, fue dado por muerto   antes del final de la telenovela.
 y en el 200 estuvo a punto de perder la vida en Barcelona a
 causa de un coma diabético y una neumonía.  Pocos músicos han tenido una conexión tan fuerte con una
 ciudad como Joe Arroyo con Barranquilla.
 Cuenta Simón Mejía, artista visual y cabeza de la banda co-
 lombiana Bomba Estéreo que “hace pocos años, en el 2007,   En la historia de la música colombiana no existe un caso de
 aproximadamente, me entró una obsesión por Joe.  Ya había   identificación tan profunda y total entre una ciudad y un artis-
 escuchado su música antes,  (¿Acaso quién no ha escuchado   ta.  Para buscar las causas de esa relación, hay que acudir a la
 ‘Rebelión’, uno de esos himnos inmortales que el Caribe le ha   discografía del genial sonero que en algunas letras fue dejando
 dejado al mundo, de la talla de ‘Pedro Navaja’, que se escuchan   pistas sobre la naturaleza de ese amor:  “Y si a mí me meten
 en todo el mundo y se bailan en todos los recovecos del plane-  preso, Barranquilla a mí me saca”, dice una de las estrofas de su
 ta?) pero cuando supe quién era Joe realmente, más allá de su   autobiográfico tema “En Barranquilla me quedo”.  Y es en esa
 Rebelión, sentí una fascinación profunda por ese James Brown   ciudad donde descansa en paz desde el 26 de julio de 2011,
 tropical, poeta de la noche y la salsa hasta el amanecer.  Me di   fecha de su fallecimiento.
 entonces a la tarea de buscarlo para hacer una película docu-



 22  REPOR T AJE | JOE ARROY O , por Chema Labrador
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